El ambiente de la casa era denso. Más de uno me dijo, juró y prometió que ahí estaba la vanguardia de la vanguardia de la escena indie. Yo no vi exactamente eso, pero te cuento: Habría unas 80 personas, 30 chicas y 50 chicos ponele. Más o menos. Ninguna silla, algunxs tirados en el piso y la mayoría parados. Casa vieja en un rincón olvidado de Barrio Norte. Varias habitaciones, no llegué a conocer la totalidad de la casa. El evento prometía el más extremo noise rock repartido entre 9 bandas/solistas y 3 escenarios. El escenario principal estaba situado en lo que alguna vez fue el coqueto living del hogar. Cuando entré había mucho (pero mucho eh) olor a porro y empezó a tocar una banda de 4 integrantes, el que supuse que era el cantante jamas cantó pero se pasó varios minutos revoleando un gato muerto de la cola. Los otros 3 no podían tocar nada, solo rompían los instrumentos. Su set duró unos pocos minutos, duró hasta que sucedió lo inevitable: los instrumentos dejaron de sonar.
Al rato me encontré con Pumba, Daniel y Laura de Siesta Indie, me quedé tomando unas cervezas (a precio de barrio norte) con ellos y fumando. De pronto, sin quererlo y sin buscarlo, se unieron al grupo más personas que no conocíamos y nos contaron de que van sus vidas. Todos tocaban en una banda buenísima y estaba buenísimo lo que hacían Se pasaron una hora hablando de ellos mismos y de lo grandiosos que son. Me los fumé un rato y arranqué con las preguntas mala onda y saltó la ficha. Ninguno tocaba nada, eran todos proyectos. No los volví a ver nunca más, pero según mi experiencia todavía deben estar sin hacer nada y contándoles a los demás lo groso que son. Unos pelotudos.
Al rato hice otra recorrida porque tenia ganas de hacer pis y vi cual era otro de los escenarios: El baño. Dentro del baño estaba tocando una chica desnuda sentada en el inodoro. En realidad hacia ruidos con la guitarra eléctrica (el amplificador en la bañera) a un volumen ensordecedor y ante la mirada de todos los que podían caber en ese escenario (eran todos hombres,obvio!). Yo me hice lugar entre el publico hasta llegar al bidet e hice pis ahí de parado y con la chica sentada al lado. Ni me miró. Cuando terminé abrí las canillas de bidet al máximo, el chorro de agua llegó hasta el techo y rebotó precipitándose como una lluvia. Luego abrí las canillas de la bañera y el agua cayó sobre el amplificador. Yo grité "LOS VOY A ELECTROCUTAR A TODOS HIJOS DE PUTAAA!!". La chica desnuda fue la primera en pararse, tirar la guitarra al piso y gritar mientras pedía que la dejen salir. Yo empecé a empujar a todos hacia afuera de manera bastante violenta. Ya fuera del baño y bastante empapados hubo varios insultos y manotazos, algunos los devolví, otros los esquivé. Volví donde estaban mis amigos, me preguntaron si pasaba algo ahí porque vieron alboroto, no dije nada y me hice el boludo pero se notaban varias miradas hostiles hacia mi. A los diez minutos les dije a mis amigos que me iba. Camino a la puerta de salida me crucé con el "cantante" de la primer banda, lo reconocí porque todavía tenia al gato muerto agarrado de la cola. Lo abrace y con notable sarcasmo lo felicité por su impecable performance, le dije que me hacia acordar a Soledad Pastorutti revoleando el poncho pero es su caso con un gato muerto. Bravo, bravo y aplaudí. Él con cara triste me dijo que ese era su gato y lo había encontrado atropellado esa misma mañana.... Lo abracé de vuelta, acaricié al gato podrido y me fui. Nunca más supe de esas bandas, ni de ese lugar. Todavía me pregunto donde habrá estado el tercer escenario...
VOS FUISTE EL DEL BAÑO?!
ResponderEliminarTE CUENTO QUE MUCHO ROCK, MUCHO ROCK, PERO QUEDÓ LA CANILLA ABIERTA Y SE LLENÓ DE HUMEDAD TODO. MIS VIEJOS ME VAN A MATAR CUANDO VUELVAN.
Abrazo de gato muerto!